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jueves, 18 de diciembre de 2008

Historia de una familia

La siguiente historia es real, los nombres son ficticios, el mensaje es evidente: "La crianza no determina en un 100% lo que seremos en el futuro".


El año es el 1959, en Santo Domingo. Todo empezó con Sahira, una joven mujer de 21 años, criada en un ambiente humilde, de muchos valores humanos, pero, a manos de su abuela una señora que por su condición de mujer sola, estaba revestida de un carácter recalcitrante. Sahira tuvo que criarse en este ambiente porque su padre, militar en la época de Trujillo, obedeciendo "órdenes superiores", se vio en la obligación de dejarse de la madre de Sahira y contraer matrimonio con la hija de un alto mando militar, en fin, la madre de Sahira presa de un enorme dolor se fue del país dejando atrás a su pequeña hija. Sahira creció siendo una estudiante brillante, una joven con un alto concepto de la responsabilidad, y con una belleza incomparable.


Se convirtió en una bella mujer, pero siempre con el dolor de no haber tenido una familia como ella hubiese deseado. Fruto de ese mismo dolor y de verse sola en un mundo dirigido por hombres es que Sahira decide casarse a temprana edad, con un hombre que ella entendía que la ayudaría a tener la familia que ella tanto deseaba. Este hombre, Roberto, era un hombre de buenos sentimientos, con poca preparación académica, pero muy trabajador. Era medio "caco caliente" el amigo, lo que haría que en su momento la pareja tuviese que salir del país rumbo a Estados Unidos.


Después de estar en Estados Unidos, y de pasar todas las vicisitudes que ustedes pudieran imaginarse, propias de una pareja de inmigrantes, nace Roberto Junior, que de ahora en adelante le llamaremos Robertico, para poderlo diferenciar de su padre. Después de un tiempo, ya habían ajusticiado a Trujillo y las cosas aparentemente estaban más tranquilas en Santo Domingo, y es cuando nuestra familia, por decisión de Sahira, regresan al país. Roberto era un hombre un tanto conservador y hasta a veces con poca iniciativa, lo que hacía que Sahira tuviese un papel protagónico en muchas de las decisiones que se tomaban.


Ya estando en Santo Domingo, nuestra familia decide traer al mundo una nueva vida, Carlos, un hermano para Robertico. Había un detalle que se convertiría en la manzana de la discordia en años venideros, Robertico tenía un parecido enorme con su padre y Carlos se inclinaba más a las facciones de la familia de Sahira, bien, esto haría que hubiese una predilección por parte de Roberto por su primogénito, pero no todo estaba en contra de Carlos, resultó ser que le caía bien a la gente por ser tranquilo, por tener un colorcito y un pelo que lo convertían en un "niño lindo". Esto, junto a lo que las amistades de la familia decía de ambos niños, eventualmente levantaría celos entre los hermanitos.


Ya para 1965, luego de haber estallado la famosa "Revolución", Sahira, después de mucho pensarlo, se divorcia de Roberto, quedando como madre soltera y con dos niños pequeños. En medio de esta situación, Sahira sentía que se llevaba el mundo por delante, nunca pasó por su mente lo que los años le deparaban.


Continuará...

2 comentarios:

  1. Pero Eric, tu pones a uno a cojer gusto leyendo y te pones de malo a continuarla en otro momento jejeje... Conchale viejo, sigue con la historia que va buena!!!

    Edú Bega :D

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  2. Pero Eric, tu pones a uno a cojer gusto leyendo y te pones de malo a continuarla en otro momento jejeje... Conchale viejo, sigue con la historia que va buena!!!

    Edú Bega :D

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